Un año más, el movimiento asociativo del autismo en España organizó el 2 de abril, en coordinación con Autismo Europa, una campaña que realiza todos los años, para visibilizar la realidad y necesidades del colectivo de personas con autismo y sus familias, para crear así una concienciación social.
El lema elegido este año es, “Una dinámica nueva para el autismo”, con el objetivo de promover un acercamiento al autismo desde una mirada diferente. Se han realizado diferentes actos públicos para poder dar a conocer el autismo y que haya una mayor sensibilización.
El movimiento asociativo invito a sumarse a la iniciativa mundial Light It Up Blue, para que cientos de edificios y monumentos de toda España se iluminen de azul como muestra de solidaridad con las personas con autismo.
La Asamblea General de las Naciones Unidas instauró en 2007 este día para poner de relieve la necesidad de contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas con trastorno del espectro del autismo (TEA), para que puedan llevar una vida plena y gratificante como parte integrante de la sociedad.
El término Trastorno del Espectro del Autismo (TEA) hace referencia a un conjunto amplio de condiciones que afectan al neurodesarrollo y al funcionamiento cerebral, dando lugar a dificultades en la comunicación e interacción social, así como en la flexibilidad del pensamiento y de la conducta.
El Trastorno del Espectro del Autismo (TEA) tiene un origen neurobiológico y acompaña a la persona a lo largo de toda su vida, aunque sus manifestaciones y necesidades cambian en función de las distintas etapas del desarrollo.
Se presenta de manera distinta en cada caso. Por eso las necesidades individuales son muy heterogéneas.
Afecta de manera fundamental a la esencia social del individuo y a su capacidad para responder adaptativamente a las exigencias de la vida cotidiana. Esto impacta no sólo en la persona sino también en su familia, y en la calidad de vida de todos sus miembros.
Requiere un abordaje integral de las necesidades de la persona, orientado a facilitar apoyos individualizados, especializados y basados en la evidencia científica que promuevan su calidad de vida y el ejercicio efectivo de sus derechos.
Es una “discapacidad invisible” en el sentido de que no lleva asociado ningún rasgo en la apariencia externa específico, y sólo se manifiesta al nivel de comportamientos.
No hay muchos datos sobre el número de personas que en España tienen autismo, lo que sí sabemos es que en los últimos años se ha constatado un aumento considerable de los casos detectados y diagnosticados. Es posible que este incremento se deba a una mayor precisión de los procedimientos e instrumentos de diagnóstico, a la mejora en el conocimiento y la formación de los profesionales, o ciertamente, a un aumento real de la incidencia de este tipo de trastornos. Nos podemos aproximar que en nuestro país hay más de 450.000 personas que sufren este trastorno.
No dejemos de lado del autismo, y hagamos visible el autismo, con ese símbolo del color azul para hacerlo presente y cercano en la sociedad crezca una mayor responsabilidad e implicación social.
Javier Abad Chismol