ANÁLISIS DE PUESTOS DE TRABAJO
“Ninguno de nosotros es tan bueno como todos nosotros juntos.”
Ray Kroc
Muchas empresas incorporarían a personas con discapacidad en su empresa pero no se animan por miedo o por desconocimiento. En ocasiones creen que el puesto de trabajo conlleva peligros que suponen un riesgo asociado para la persona y en otras, no saben qué puesto de trabajo podría desempeñar una persona con discapacidad.
Estas inseguridades se solucionan con un análisis de puestos de trabajo (APT) ya que permite analizar y extraer todas las tareas susceptibles a desempeñar por una persona con discapacidad y evaluar los riesgos asociados a dichas tareas. También nos aporta una mayor seguridad en los casos de éxito en la incorporación de la persona en la empresa debido a que nos facilita escoger el perfil profesional más adecuado para las tareas seleccionadas.
En alguna ocasión la empresa necesita cubrir un puesto de trabajo definido, pero en la mayoría de los casos, se crea un nuevo puesto de trabajo tras el análisis de puestos (APT) con el fin de aligerar o aliviar otros puestos de trabajo que cuentan con tareas sencillas o repetitivas. Esta nueva colocación o puesto supone dos ventajas claras para la empresa:
- Aumento de la productividad
- Rentabilidad de los puestos de trabajo
Pongamos un ejemplo fácil:
En un departamento de administración hay muchas tareas que hacer: Facturación, contabilidad, atención telefónica, introducción de datos en programas, escaneado y archivo digital, archivo físico, fotocopias, gestión del correo, redacción de cartas o cumplimentación de cartas prediseñadas, envío de emails, relleno de formularios etc. De todas estas tareas, hay algunas que requieren de una cualificación alta y otras, que son más repetitivas y rutinarias, hacen perder el tiempo a las personas más cualificadas. Esto ya no sólo conlleva una pérdida de tiempo y de dinero para la empresa sino que en ocasiones, estas tareas pueden provocar una falta de motivación para la persona cualificada.
Siempre se ha dicho que hay un trabajo para cada persona y efectivamente, una persona con discapacidad severa puede llegar a realizar tareas repetitivas y rutinarias con una eficacia extraordinaria si es previamente entrenada y además disfrutar de hacerlas porque se sienten capaces y útiles para la empresa.
Cómo comentábamos anteriormente, con esta segregación de tareas dentro de un puesto de trabajo hemos conseguido un aumento de la motivación de los trabajadores, una mejora de la productividad de cada persona y una mayor rentabilidad de los puestos de trabajo por productividad y por salario. En projecte Trèvol, la técnica laboral junto a la persona designada por la empresa, recorren todos los departamentos de la organización para poder realizar un análisis de puestos de trabajo y seleccionar al perfil profesional más adecuado. De esta forma, se incrementa la seguridad del éxito tanto para la persona cómo para la empresa.
Celia Hernández Estevan (Técnica laboral del Projecte Trèvol)