Valerio Catoia es un atleta italiano con Síndrome de Down que esta semana se ha convertido en un héroe porque salvó a una niña de ahogarse en una playa, un gesto que no solo llama la atención por la valentía y el coraje de hacerlo, sino también porque podemos comprobar de primera mano que una discapacidad intelectual no priva de tener capacidades, al contrario pueden y deben potenciarse, este joven de 17 años es un gran deportista y además pudo gracias a su valentía y su capacidad salvar a esta niña.
Según informó el periódico Il Messaggero, hace dos días el joven de 17 años estaba con sus padres y su hermana en la playa italiana de Sabaudia, ubicada en la región de Lazio.
Mientras se bañaba tranquilamente en el mar, escuchó a dos niñas gritar y cuando volteó vio que estaban siendo arrastradas por la corriente. Sin pensarlo dos veces, Valerio y su padre nadaron en dirección hacia ellas para salvarlas, un gesto de padre e hijo que demuestra una gran valentía.
Aunque el mar estaba agitado, el joven y su padre lograron llegar hasta ellas. Cada uno agarró a una niña y nadaron de regreso a la orilla. Allí se las entregaron a los salvavidas para que las atendieran.
Los salvavidas abrazaron a Valerio y lo felicitaron por su valentía. Después su propia familia hizo lo mismo. Sin embargo, la madre de las niñas se fue sin darles las gracias al joven y a su padre, algo que llama poderosamente la atención, porque sigue habiendo ciertos prejuicios y desconfianza.
Valerio practica natación desde niño y actualmente pertenece a la Asociación Polideportiva italiana Hyperion. Ha competido en campeonatos nacionales desde los once años y ha ganado varias medallas.
A mediados de 2016 participó en las primeras olimpiadas para atletas con síndrome de Down que se realizaron en la ciudad italiana de Florencia. Allí también hizo una exhibición de técnicas de salvamento.
Actualmente en países como España, donde el aborto es legal, el 90% de los padres que descubren que su bebé nacerá con Síndrome de Down deciden abortarlo, y por lo tanto no pueden nacer, es vital creer en las personas, y en las capacidades.
Asimismo, Islandia es uno de los países que tiene un bajo índice de nacimiento de bebés con Síndrome de Down. Desde 1995 hasta la actualidad, solo han nacido 108 personas con la alteración genética de la trisomía 21.
Según la Asociación de Síndrome de Down en Islandia, en el 2016 han nacido solo seis bebés con esta deficiencia genética.
Noticias como esta son las que nos hace reflexionar sobre el valor de la persona, y que nadie sobra, y que todos aportamos a la sociedad y formamos parte de la misma, y además de una manera activa, como nos demuestra este chico, y que más que asombrarnos como una excepción, veamos que esto es algo normal si se les da la oportunidad de formar parte activa de la sociedad.
Javier Abad Chismol