Recientemente el Presidente de Down España, Mateo Segundo, advertía que se está produciendo un cierto retroceso o parón en el avance de la educación inclusiva, y es que sigue habiendo un gran distanciamiento entre lo ideal, lo que se pretende y luego como se lleva a la práctica o incluso si se llega a realizar. A todos les pude parecer bien la inclusión pero luego no mover un dedo y quedarse tan solo en una palmada en la espalda.
Es evidente que todos aspiramos a una educación inclusiva y también una integración laboral real en la empresa ordinaria, pero aun sabiendo donde se quiere llegar, si no ponemos los medios para lograrlo no podemos avanzar, ahí entra la mentalización y responsabilidad social, los equipos técnicos y las instituciones que apoyen para que esto se pueda plasmar en una realidad y no en un ideal.
En ciertos casos se niega la escolarización en centros ordinarios y se les deriva a centros de educación especial, que aunque cumplen su labor, supone un retroceso en el avance de una educación inclusiva.
No hay que dar marcha atrás en todos los avances de la educación inclusiva, es evidente que los programas de atención temprana han aportado mucho a la inclusión en las etapas del sistema educativo pero hay que seguir.
Los centros especializados por discapacidad o aulas específicas o en los centros propios no son la solución. Con el pretexto de ser mejor atendidos se les acaba desplazando, lo que ya no supone una inclusión, aunque sea una atención. La inclusión funciona con la implicación de todos, compañeros, profesores.
La Escuela Inclusiva y Atención Temprana es el comienzo para luego insertar en el trabajo a través del Empleo con Apoyo en la empresa ordinaria.
Por este motivo hay que mejorar la formación de los jóvenes e insistir en procurar los apoyos necesarios para que esto sea un proceso y una realidad.
De la formación y del trabajo se promociona la vida independiente, y para ello hay que procurar los recursos. En definitiva que se puedan adecuar todas las etapas de la vida de la persona con discapacidad intelectual incluyendo también la vejez.
Javier Abad Chismol